IMPULSO DE MALDAD: ¿Qué es el cuerpo biológico o la carne?

IMPULSO DE MALDAD

TEMA NO APTO PARA DOGMÁTICOS

Teología | Teólogo Diletante | 2016-2021

 Ensayamos hacer el bien, sin embargo, identificada realidad privativa nos lleva a excesos, sea por placer o protervia, por tanto, el ánimo de maldad prevalece. Evidencia: la pseudovida del creyente. Romanos 7:14-25

Temas, próximas cuatro semanas

         I.            Biología, carne o naturaleza pecaminosa    

 A.   Genética

  a)      Gen VMAT2 o gen de la Espiritualidad

 B.   Mente

 C.   Personalidad

¿Qué es el cuerpo biológico o la carne?

El cuerpo es un instrumento que Dios creo y utilizó para que el hombre pueda coexistir en un mundo material. Sin embargo, nosotros en esencia somos espíritu, Dios al crearnos a Su imagen y semejanza nos dio Su espíritu, Yahweh es Espíritu, por lo tanto, somos cien por ciento: espíritu 1 Corintios 3:16 . Al momento de la muerte dejamos el cuerpo y nuestra sustancia esencial: espíritu alma (EA). El EA vuelve a Dios quien la dio,^{1. Eclesiastés12:7} el cuerpo, la carne, la materia orgánica regresa al polvo, porque polvo somos, embalaje de tierra que sirve mientras subsistimos en el mundo. ^{2. 2Corintios 5:1,8} Dios pudo utilizar cualesquiera receptáculos y de diferente estilo, materia o consistencia para depositar el espíritu alma, a fin de que, estemos aptos a enfrentar y conquistar la naturaleza, sin embargo, no lo hizo, lo que creó es lo que somos: —barro transformado en carne viva, con espíritu alma observable— ^{2.2 Génesis 2:7}

Otro punto fundamental a marcar son los acontecimientos que llevaron a la varona, llamada posteriori Eva, a existir junto a Adán. Relata la sagrada Biblia que, de la costilla de Adán, Yahweh Dios crea a la mujer, extirpó del único EA disponible, Adán, una costilla y creó a la mujer. Podemos aseverar atrevidamente, en lenguaje actual, que Yahweh Dios clonó nuestros componentes y creó un sexo complementario para Adán, no creó un sexo opuesto, creó otro género, eso sí: —la mujer—, género femenino, pero opuesto no; es la intención de Dios suplementar la creación del hombre. Yahweh por su Omnisciencia creó a Eva con diferentes matices, tanto en los elementos intangibles como en lo biológico. No hay referencia bíblica si Dios sopló a Eva para darle vida, Yahweh la creo de la costilla de Adán y ya está, es carne de nuestra carne.^{6. Génesis 2:20,23} Recuerden que para Dios nada es imposible.^{7. Mateo 19:26}  Yahweh la sacó de Adán, Dios utilizó otro método igual de omnisciente para darle vida, la biblia lo dice, —de la costilla de Adán—, y elucubrar sobre el porqué Yahveh Dios no relata, en las Sagradas Escrituras, los detalles del cómo dio vida a Eva, es dogmático.

Las subsiguientes personas, después de Adán y Eva, somos productos de la procreación, recibimos el EA bajo este procedimiento riguroso de fecundación, Su Ubicuidad Divina determinó con inconmensurable inteligencia que, hacerlo como lo hizo fue lo mejor para el futuro del ser humano, tanto en la vida material como en la vida del EA en el mundo espiritual. ^{8. Génesis 1:28}

*** (…) La fecundación humana ocurre cuando un espermatozoide entra en el óvulo en la primera porción de la trompa de Falopio, haciendo que la mujer quede embarazada. (…) El desarrollo embrionario (óvulo de la mujer germinado por el espermatozoide del hombre) se da desde la nidación hasta la 8ª semana de gestación. En esta fase ocurre la formación de la placenta, el cordón umbilical y el contorno de todos los órganos. Hasta la 9ª semana de gestación se denomina embrión y, de allí en adelante, feto, después de la 12ª semana de embarazo la placenta ya está lo suficientemente desarrollada para que pueda proporcionar todos los nutrientes necesarios para el desarrollo del feto.  (…) Un único espermatozoide atraviesa su membrana (óvulo), trayendo consigo 23 cromosomas del hombre; inmediatamente, estos cromosomas aislados se combinan con los otros 23 cromosomas de la mujer, formando un complemento normal de 46 cromosomas dispuestos en 23 pares. Esto da inicio al proceso de multiplicación celular, cuyo resultado final es el nacimiento de un bebé saludable (…). 

Fuente: https://www.tuasaude.com/es/fecundacion/

La fecundación estará concluida al integrarse los cromosomas sexuales XX de la mujer y XY del hombre. El momento de la fecundación, por azar, se enlazará un cromosoma X o un cromosoma Y, por lo tanto, podría engendrar un niño —XY— o una niña —XX—, que inmediatamente pasarán a sumarse, este nuevo par cromosómico sexual, resultando los 23 pares, que dan los 46 cromosomas que mantenemos todos los seres humanos, excepto claro las personas que podrían poseer una enfermedad cromosómica. Entonces podemos inferir que, es necesario la participación de la pareja: hombre y mujer. Estamos en el apogeo de la tecnología en todas las disciplinas, gracias a Dios, por tal razón existe diferentes tipos de fecundación, in vitro, p. ej., que no son temas de este ensayo. Conclusión, si pretendemos que venga al mundo una nueva persona, esencialmente urgimos la germinación del óvulo de la mujer y el espermatozoide del hombre. Eximio, inefable y acendrado determinismo de Dios. Repetimos: si queremos lograr la creación de un nuevo ser humano, siempre indubitablemente necesitaremos el óvulo de la mujer y el espermatozoide del hombre. Y por supuesto, este armonicista, cruce de pareja, debe ser de amor recíproco. El cómo se puede dar una relación consensuada humana de amor, es mediante el amartelamiento a la pareja complementaria. Se puede dar de tan diversas maneras, las cuales todos conocemos. Desmenucemos fragmento de un poema. El autor (hombre) aquí pide autenticidad hacia la unión de amor, con el fin de resistir a los dilemas, inconfundibles, de las complejas relaciones humanas.

¿Deseas que te amen? (Edgar Allan Poe)

¿Deseas que te amen? No pierdas, pues,

el rumbo de tu corazón.

Solo aquello que eres has de ser

y aquello que no eres, no.

Así, en el mundo, tu modo sutil,

tu gracia, tu bellísimo ser,

serán objeto de elogio sin fin

y el amor… un sencillo deber.

Ahí tenemos una tarea a cumplir, como una alternativa a menguar el impulso de maldad. Dios también señala en Sus enseñanzas, al recordarnos, el hermoso verso de las Sagradas Escrituras:

Que nunca te abandonen el amor y la verdad:

llévalos siempre alrededor de tu cuello

y escríbelos en el libro de tu corazón.

Contarás con el favor de Dios

y tendrás buena fama entre la gente.

Proverbios 3:3-4

El hombre en ciernes, busca la consolidación de lo perfecto, que ya no lo es. Sin embargo, Dios proveyó el libre albedrío, con el cual podemos descubrir la relación amor que nos lleve a la concepción de un ser humano, y solo será posible entre: hombre y mujer, no existe otra manera. Aunque los grupos confundidos en las artimañas del diablo, mediante eufemismos en boga, digan lo contrario.   

Yahweh Dios sabía que el ser humano caería, por lo cual es axiomático señalar: —Dios, aun a sabiendas, guardaba esperanzas de que no sucediera la ruina de Adán—. Por tal doctrina, a partir de la creación del hombre, el EA es transferido de un ser vivo a otro ser vivo por intermedio de la procreación, desde Adán y Eva, a Caín, Abel y Set, ellos a sus descendientes y así sucesivamente, será de este modo hasta que Dios disponga otra cosa. Sin ser ni medianamente escatológicos, pero el Génesis, capítulo tres, profetiza la epopeya del principio del fin de la humanidad ^{8. Génesis 3:1-23}. La caída del hombre, determina la pecaminosidad de su cuerpo carnal o materia biológica, convirtiéndolo en proscrito. Generando en este intrincado proceso hacia la maldad a elementos, todos, producto de este yerro y sobre los cuales vamos a reflexionar.

¿Hay esperanzas? ¡Sí!, ^{9. Génesis 4:7}